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Noemí de Miguel es periodista deportiva. Actualmente podemos verla como presentadora en «El Día Después» y también en las retransmisiones del mundial de F1 en DAZN. Hoy conocemos la historia de University Sports a través de su co-fundadora.

¿Cómo surge University Soccer?

La agencia surge de la espina clavada que tenía de haber dejado por el camino el baloncesto, deporte que practicaba, al ver que no era compatible estudiar y seguir creciendo por ese lado en España. Y que además, siendo mujer, no tenía proyección profesional.

Conocí a David Rueda, uno de mis socios, en el momento en el que él -con una larga experiencia- quería crear un proyecto sin el lastre del puro negocio sino más emocional, como lo es el proceso, pegado a las personas. Una agencia boutique. Y así seguimos desde 2019.

Lo de empezar por University Soccer fue simplemente por mi vinculación con el deporte, mayor con el fútbol, y aprovechar esos contactos. Pero siempre hemos trabajado con becas de atletismo, golf, tenis y ahora ya se aúnan en University Sports.

¿Cuál es el proceso para optar a una beca universitaria con University Sports?

El primer paso es el de desarrollar un perfil deportivo y académico de las chicas y chicos. Y para ello no solo valen los resultados, sino que también queremos entender cuáles son sus aspiraciones: competiciones que les motivan en USA, carrera que quieren estudiar, zona en la que les gustaría vivir… En definitiva, sus expectativas. En las que también entran las familiares y expectativas económicas.

Entendiendo eso muy bien les informamos de qué tipo de beca podrán obtener y si hay match hacemos equipo US y trabajamos ya la negociación con los entrenadores interesados y no paramos hasta que logramos la mejor opción de beca en los Estados Unidos.

En el proceso burocrático cuentan con nuestro soporte.

¿Son solo estudiantes/deportistas españoles para becas en Estados Unidos o también trabajan con otros países?

Se trata de un mundo global, de captación de talento internacional para USA y – por tanto – siguiendo con esa línea nosotros también trabajamos en España, Italia, otros países europeos, americanos o africanos. Va en el espíritu de la agencia y su actividad, al igual que en el nuestro y nuestras conexiones. Son más de 20 países con los que hemos ya hemos trabajado y lo normal es que la lista siga creciendo. 

De hecho, hay una tendencia muy interesante con estudiantes-atletas que han sido clientes y se han convertido en scout y siguen siendo parte del equipo para recomendar en sus países la agencia, porque para ellos fue la clave de su éxito. Tenemos a Aleja Mesa en USA y Colombia o a Yan Rosado en la República Dominicana.

¿Qué tipo de apoyo y servicios diferenciales brindan a los estudiantes una vez que llegan a Estados Unidos?

Podemos decir que nos vamos con ellos. Parece normal, pero no lo es. El acompañamiento de University Sports sigue una vez que llegan a su destino con el servicio de psicología que pueden llevar a ese momento. Echar de menos, tardar un poco más en la adaptación, el cambio en el modo de entrenar o dudas de rendimiento están en el portfolio de nuestra psicóloga deportiva. 

En ocasiones el nivel de inglés es un handicap inicial, pero con la mejora que se produce allí hay ocasiones en las que sugerimos un cambio a una mejor beca y universidad. Y esto sigue formando parte de nuestro trabajo sin coste extra.

Y, deportivamente, atendemos a los resultados que van teniendo para orientar ese progreso a -por ejemplo- hacer stage de pretemporadas con equipos semi-profesionales y acercarles al profesionalismo.

¿Podrías compartirnos alguno de esos casos de éxito?

Dada la naturaleza de AEMED os citaré dos casos de deportistas femeninas: 

Alejandra Mesa, a la que antes ya cité, nos pidió ayuda tras una mala experiencia. Trabajamos su beca con Francis Marion University donde acabó su carrera y compitió. Ahora, es entrenadora, emprendedora y scout de University Sports. 

Carla Martínez fue ya para un postgrado a Lubbock Christian University, le costaba salir de Girona, su región de origen. Volvió con su máster y como jugadora de fútbol profesional a Italia y esta temporada compite en Finlandia. 

Imaginad lo que suponen historias como las suyas.

¿Podría compartirnos cómo funciona vuestra labor a través de alianzas con clubes, academias, fundaciones y empresas?

Reconozco que en el fútbol, mi motivación inicial con este proyecto fue el de vincularnos a la mayor cantidad de clubes para formar parte de su filosofía. Soñaba con equipos comprometidos que formaban a futbolistas y motivaban en la parte académica. Que sintieran esa responsabilidad social corporativa como empresas que son con el extra de lo que supone que sus canteras las forman sus aficionados. Quería un plan para todas esas chicas y chicos que en el cruel embudo quedan por el camino y darles continuidad compitiendo y estudiando en USA. Sin duda ese vínculo con el club tiene continuidad y minimiza la frustración que supone cuando les dicen que no cuentan con ellos para el siguiente año de juvenil, por ejemplo. Pero en el fútbol profesional, quienes tienen más medios, está costando. Espero que cambie. 

Tenemos muchos clubes en Cataluña, Galicia, Madrid y otras regiones con ese compromiso. A Rosalía u Olympia que son clubes femeninos. 

Y además, sí, David Villa y todas sus academias a nivel mundial incluyen nuestros servicios. También Denis Suárez en su escuela. 

Seguiremos insistiendo y estoy convencida de que llegarán más y clubes polideportivos, empresas (ya tenemos programas en marcha), fundaciones que sientan que el mejor legado que pueden dejar a los jóvenes es la oportunidad de lograr una carrera, un idioma, competir y una experiencia de vida diferencial. Se convertirán en sus mejores embajadores.